Cruzada libertadora
Combate de Rincón 24 de setiembre de 1825
Esta acción, ocurrida en el Rincón de las Gallinas, actual Departamento de Río Negro, marcó uno de los hitos fundamentales de la lucha que realizaban los Orientales solos frente al poderoso Imperio del Brasil. Como consecuencia de una Junta de Guerra realizada el 21 de setiembre, se decide que el Gral. Rivera ataque el Rincón de las Gallinas con 250 hombres para capturar las caballadas enemigas. Mientras tanto el Coronel Andrés Latorre atacaría Mercedes para distraer las fuerzas del Brigadier Abreu que contaba también con la flotilla fluvial que actuaba en la zona. Los brasileros mientras tanto, tenían una guardia de 25 hombres, protegidos por una trinchera destinada a evitar la salida de las caballadas que solo dejaban un punto de entrada por la estribación final de la cuchilla de Haedo. Estas reducidas fuerzas, sin embargo contaban con el apoyo de las estacionadas en Mercedes y de 700 hombres de refuerzo de los Regimientos de Caballería de las Misiones Nº 24 y 25 al mando de los Coroneles Jerónimo González Jardim y José Menna Barreto que venían en camino desde San Francisco en Paysandú. La operación se realizó con fortuna al amanecer del día 24 a pesar que el Cnel. Latorre no atacó Mercedes, tomándose las caballadas, pero a las 8 de la mañana el Gral. Rivera es avisado que se acercan las tropas de Jardim que entran en el área una hora después, sin sospechar que ésta se encuentra en manos enemigas. La consecuente acción, basada en la sorpresa, constituyó un nuevo éxito por el cual no solo se aseguró la captura de una numerosa caballada, sino que se obtuvieron prisioneros, valioso armamento y vestimentas para las mal armadas y vestidas huestes patriotas. Se mostraba así un camino de gloria que los Orientales seguirían, con los jalones de Sarandí, Ituzaingó y la toma de las Misiones Orientales hasta obtener su independencia.
Sarandí 12 de octubre de 1825
Librada por las tropas brasileñas enviadas a detener el avance del ejército de la Cruzada Libertadora comandado por el Gral. Juan A. Lavalleja luego del éxito obtenido por el Gral. Rivera en el combate de Rincón de las Gallinas, donde les roba las caballadas. Tuvo lugar en las costas del Arroyo Sarandí, afluente del río Yi, actualmente Departamento de Florida. El triunfo obtenido por el ejército oriental fue determinante de que el Gobierno de Buenos Aires se decidiera a intervenir en apoyo de la lucha de la Cruzada Libertadora para expulsar de la Banda Oriental, entonces designada por sus ocupantes como Provincia Cisplatina, a las fuerzas del Imperio del Brasil.
Las Piedras 18 de mayo de 1811
Toma de la Fortaleza de Santa Teresa, 31 de diciembre 1825
Iniciada con la Cruzada Libertadora la Fortaleza de Santa Teresa era poseedora de la llave estratégica que permitía cerrar las comunicaciones por el Sur en el paso de “La Angostura”. Logradas las victorias de Rincón y Sarandí, la fortificación es capturada por sorpresa por las fuerzas patriotas al mando del Coronel Leonardo Olivera, (Comandante Militar de Maldonado) en la madrugada del 31 de diciembre de 1825. La toma se produce mientras los brasileros piensan que las fuerzas patriotas se encuentran todavía lejos por lo cual la sorpresa de la guarnición, en su mayoría soldados de origen austríaco al servicio del Imperio de Brasil es total y según el parte del vencedor dirigido al Capitán Gral. Lavalleja el 1º de enero de 1826 «… sorprendimos a la guarnición, hallando a todos en camisa…» sin posibilidades de resistencia efectiva.
Combate de la Guardia del Chuy 1 enero 1826
Luego de la toma de la fortaleza de Santa Teresa, acampando las fuerzas orientales en isla de la Coronilla, el Cnel. Olivera organiza sus tropas en tres columnas para tomar la Guardia del Chuy: las guerrillas, a cargo del Capitán Juan Ventura González atacarían por el lado izquierdo, las fuerzas del Capitán José Suárez atacaba por la derecha mientras las tropas del Capitán Luciano de la Rosa, con banderas y al toque de clarines y cornetas debían avanzar por el centro.
A pesar de la resistencia de las tropas brasileñas luego de esta rápida lucha, éstas fueron vencidas, capturando numerosos prisioneros, 150 armas largas y unas 10.000 municiones.
Combate del Cerro 9 de febrero de 1826
Allí el 9 de febrero de 1826 las fuerzas del entonces Tte. Cnel. Manuel Oribe integradas por Dragones Libertadores y Milicias de Canelones vencen a los brasileros salidos de la guardia que tenían en la Casa de la Pólvora persiguiéndolos hasta que se refugiaron en la Fortaleza del Cerro. Este encuentro, culminación de la primera etapa de la lucha libertadora se produjo en el entorno del sitio patriota de Montevideo donde el Cerro era un importante punto defensivo de avanzada para los brasileros. Presenta connotaciones muy atractivas pues tanto la Casa de la Pólvora como la Fortaleza todavía existen siendo la última un símbolo de fuerza en el Escudo Nacional. Existe documentación sobre el tema no habiendo sido tratado con el ajuste pictórico e histórico necesario hasta el momento.
Ituzaingó 20 de febrero de 1827
Batalla enmarcada en la invasión de Río Grande del Sur por el Ejército Republicano de las Provincias Unidas. La lucha revolucionaria oriental, que tuvo uno de sus puntos álgidos en la batalla de Ituzaingó no puede considerarse como un hecho aislado referente a la historia local de una nación. Involucró a la república argentina y al recién fundado el imperio de Brasil contendientes enfrentados en este conflicto por el intento de controlar nuestro país, boca de la cuenca platense, surgido de la división del Virreinato del Río de la Plata. La lucha quedó en un impas en el cual el ejercito brasilero, si bien derrotado, todavía era poderoso. El ejercito republicano pasa a cuarteles de invierno en Cerro Largo.